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La principal ventaja de conformar una sociedad comercial es que sus integrantes podrán proteger su patrimonio individual al diferenciar sus bienes personales de los de la empresa.

Además, la constitución de una sociedad permite reunir el capital inicial entre varias personas, lo que facilita el desarrollo del proyecto en su etapa inicial.

Por último, una sociedad comercial otorga a la empresa una estructura de organización sólida y con reglas definidas, aspectos que facilitan la administración de la misma.

Al momento de decidir qué figura societaria es la más adecuada para una empresa, es necesario evaluar un conjunto de aspectos: el tipo de actividad que se va a desarrollar, las dimensiones del negocio, el patrimonio disponible de sus integrantes, los gastos administrativos de cada tipo de sociedad, las proyecciones a futuro y los deseos y objetivos de los integrantes.

Para tomar la decisión correcta, es importante que te asesores con expertos. Desde Calim, te acompañamos en cada paso para crear el tipo de empresa más adecuado para vos.

Coordiná una videollamada con uno de nuestros contadores y despejá todas tus dudas.

Tanto la Sociedad Anónima (SA) como la Sociedad de Responsabilidad Limitada (SRL) y la Sociedad por Acciones Simplificada (SAS.) son “sociedades de capital”. Esto significa que sus integrantes solamente deberán responder por el capital que aportaron.

Respecto a la inversión inicial, las SA requiere un capital mínimo de $100.000. Las SAS, el equivalente a dos veces el salario mínimo vital y móvil. En las SRL, si bien no está establecido un monto, para su aprobación se tendrá en cuenta que éste sea acorde a la actividad que se va a desarrollar (muchas veces se solicita un mínimo de dos sueldos vital y móvil).

Para empresas pequeñas o que recién comienzan, generalmente se utilizan las SAS o las SRL, ya que no presentan tantos requisitos para su constitución. Las SA, en cambio, resultan un poco más complejas.

En cuanto a la cantidad de socios, para constituir una SA o una SRL debe haber un mínimo de dos. Las SAS, en cambio, pueden crearse con un sólo integrante.

Por último, en las SA (a diferencia de las SRL y las SAS) siempre existe la obligación de presentar los estados contables a la IGJ (o la entidad provincial que corresponda) una vez al año.

En Calim, hacemos todo por vos. Nos ocupamos de realizar los trámites necesarios para que obtengas el estatuto de tu sociedad de forma rápida y sin complicaciones.

1- Coordinamos una videollamada para que despejes todas tus dudas con uno de nuestros contadores y, en conjunto, elijan qué tipo de sociedad conviene para tu negocio.

2- Luego, nosotros nos encargamos de gestionar tu estatuto societario, la rúbrica de los libros y el registro del CUIT de tu empresa en AFIP. ¡Dejamos todo listo para que pongas en marcha tu negocio!

Una vez creada tu sociedad, podés adherirte al plan Empresas de Calim para que liquidemos tus impuestos mensuales y nos encarguemos de las obligaciones contables de tu negocio.