Al comenzar cualquier actividad económica, es obligación pagar impuestos. Para ello, será necesario que te inscribas en AFIP: primero deberás activar tu CUIT, y una vez que lo tengas, podrás registrarte en los impuestos que te correspondan.

CUIT significa “Clave Única de Identificación Tributaria”. Está formada por tu DNI, más otros números. Toda persona que tenga que pagar impuestos, deberá tramitar el CUIT.  Se obtiene de forma sencilla y 100% digital. Junto con el CUIT, se puede sacar la Clave Fiscal.

Puede inscribirse en AFIP cualquier persona que esté realizando una actividad económica, tanto de servicios como de venta de productos, y posea DNI argentino vigente.

¡Es muy simple! Para realizar la inscripción digital de AFIP, sólo necesitás tu documento y un celular con cámara. Podés completar el formulario con tus datos para comenzar el trámite de alta.

Existen dos tipos de inscripciones, según la actividad que vayas a realizar:

• Monotributo: posee tope de facturación. Se paga mediante una cuota fija, cuyo importe variará según la categoría. Se vincula a pequeños contribuyentes.
• Responsable Inscripto (o Autónomo):  NO posee tope de facturación. Está pensado para aquellos que obtienen ingresos mayores que los monotributistas. Implica la obligación de presentar y pagar IVA y Ganancias. El importe a abonar se determinará en base a tu facturación de cada mes.

Si ya no estás llevando a cabo tu actividad económica, podrás realizar la baja en cualquier momento. Es un trámite simple, que se realiza desde la web de AFIP. ¡Tené en cuenta que si dejás de abonar tus impuestos pero no registrás la baja, comenzarás a acumular deuda!

Luego de obtener el alta en AFIP, hay muchas opciones para abonar tus impuestos. Podés hacerlo a través de tu homebanking, en cajeros automáticos, desde el portal de AFIP con tarjeta de débito o crédito, con Mercado Pago, o por débito automático.